“Si bien debe costar dar este paso, es necesario que sea un paso jubiloso y sepan que siempre van a tener a esta familia corporativa para ustedes, aunque pueden existir cambios, las instituciones quedan y son lo importante. Esta Corporación Municipal es una institución que se ha caracterizado por cuidar a sus trabajadores, aquí los queremos, los apoyamos y los protegemos”, fueron las palabras que dedicó la Secretaria General de la Corporación Municipal de Educación, Salud Y Atención de Menores de Puente Alto, Sandra Fuentes, quien se despidió agradeciéndoles y deseándoles lo mejor.
Uno de los protagonistas fue Ángel Cordero, más conocido como el “tío patito”, quien como auxiliar residente vivió 15 años en el Complejo Educacional Consolidada y hoy tras 44 años se retira muy acongojado por tener que alejarse de la que siempre ha sentido como su casa. “Me da mucha pena porque fue mi hogar y más que un trabajo era un hobby para mí, estar con los niños y el contacto con los apoderados, los educadores y los directores. Tener que irme ahora me da mucha pena porque fue un lugar importante donde incluso estudiaron mis hijos”.
En representación de los directores, Viviana Romero, directora de la Escuela Especial Open Door, los felicitó por su trabajo, muchas veces silencioso, siendo puentes que conectan a los estudiantes para que cada jornada escolar sea más rica, más humana y más segura. “Nos encontramos aquí para despedir a un grupo de personas que, con dedicación, esfuerzo y amor por la educación, han sido parte fundamental de la vida de nuestra comunidad educativa. A ustedes, asistentes de la educación que hoy inician una nueva etapa, les debemos el reconocimiento por su entrega, por su capacidad de ser un apoyo constante y por su incansable compromiso con nuestros niños, niñas, jóvenes y adultos”.
Palabras, que Adriana Peredo, agradeció y nos contó que fue asistente de la educación durante 34 años, en el Liceo Comercial y en el CEIA Teresa Moya. “Me voy a mi casa muy tranquila, pero con sentimientos encontrados porque dejaré de hacer mi vida actual y por otro lado me voy a disfrutar a mi familia, a mis nietos, que, aunque los veo siempre, ahora voy a poder estar más con ellos”.
Más entusiasta fue Gloria Arce, quien con 29 años en la Escuela Luis Matte Larraín como asistente de la educación, nos contó que se retira feliz. “Con convicción les digo que fue maravilloso haber trabajado con mis estudiantes, que son mi tesoro, pero estoy feliz porque este paso me permitirá concretar proyectos y sueños pendientes. Me voy agradecida porque formo parte de una familia corporativa con un hijo, un nieto y una hermana que trabajan en la corporación. Así que el vínculo sigue y bueno con este término de etapa voy a poder realizar mi anhelado viaje por 3 meses a Australia donde me reuniré con mi familia. Así que soy una agradecida de Dios porque él siempre me acompaña”.
Al finalizar el encuentro, Viviana Romero agregó. “Desde el corazón de la comunidad educativa de Puente Alto, les queremos expresar nuestra más sincera gratitud por sus años al servicio de la educación pública y porque sabemos que cada uno de ustedes ha sido testigo de los logros de nuestros estudiantes, y que en su trabajo diario han puesto en práctica los valores que hacen de nuestra comuna un lugar único: el compromiso, el respeto, la solidaridad, la empatía y la constante búsqueda de un mejor futuro para todos. Que esta nueva etapa de sus vidas sea tan rica y llena de bendiciones como lo ha sido su recorrido con nosotros”.